Confusión que atormenta las almas

 Conjugación de sentimientos que me hacen decir una y otra vez lo siento.

   Te fallé y lo lamento, caminé pérdida entre gente sin sentimientos que me dañó

Mi soberbia se antepuso y me volví cruel y despiadada dañando a quien me amaba

Sin quererlo me convertí en un ser vil e innoble igual a los que me hicieron daño

Sin saberlo poco a perdía todo rastro de bondad, sin detenerme a recapacitar ni perdonar

Ese ruin sentimiento se apoderó de mi alma hasta que vencida pude ver finalmente la realidad

Era lo que tanto odiaba esos seres sin alma en eso me habían convertido en un ser parecido a ellos

Finalmente me arrodilló vencida ante el peso de culpas que no tenía pero que había adoptado como mías

Volví de nuevo a la piedad, al amor, a la bondad, me alejé de personas nefastas, de todo lo impuro

Estuve a solas contigo, eso detuvo la furia que se había instalado en mi alma, y la paz me invadió

Volví a ser lo que antes era, lo que nunca debí dejar de ser, y lo que nunca quiero volver a perder

El huracán de malos sentimientos fue aplastado por tu amor infinito que me otorgó la total redención 

En estos momentos estoy tranquila, feliz y en paz, no quiero volver a saber de personas nefastas

Ni tener malos pensamientos, ni sentimientos, no volveré a andar por esos lugares de perdición

Porque al estar junto a personas que tienen odio en su corazón, produce desasosiego, zozobra

El miedo, la sed de venganza hace temblar el corazón de las almas nobles, y eso no debe suceder

Si sientes que algo te daña, aléjate no sea que tu alma se pierda porque al dañarte te provocan odio

Y ese odio es oxidación tremenda para tu corazón, aléjate y acércate a las almas buenas, que vibran

Con armoniosa paz y bondad, porque esas vibraciones te alcanzarán nunca pierdas la inocencia

Que trae consigo la bondad, precedida por el amor, que te inspira a cometer sólo actos buenos.

 Deja a los malvados en sus mundos, no te centres en ellos ni trates de vencerlos deja que se maten

Entre ellos, tú no perteneces a ese mundo, aléjate, que Dios te espera con los brazos abiertos.