Pobres gobernantes

 Pobres de aquellos gobernantes, que en su afán por conquistar el mundo se pueden así mismos. Qué vale la riqueza cuándo estén amortajados, y morados ante la ira de Dios?. Al querer ganar, pierden sus almas, deben vidas humanas, las cuáles los atormentarán en la hora final, querrán regresar atrás en el tiempo, se arrepentirán de sus decisiones. Porque el redentor lo dijo hace tiempo. No pretendas conquistar al mundo, porque algún día ya no formarás parte de este. No valdrán arrepentimientos ni gritos ni llores, pobres gobernantes, porque al querer obtener gloria y riqueza perdieron lo único valioso que les pertenecía, su alma. La gloria de Dios es infinita , pero lo único que no perdona Dios es la avaricia que los lleva a tomar la vida de seres humanos creados por Dios. No más guerras, paren los asesinatos porque en la hora final, tarde se darán cuenta que el destino que les espera es terrible y es eterno. Las riquezas de este mundo otros las disfrutarán y hasta sus descendientes los abominarán y olvidarán porque no querrán ser ligados a estos abominables seres. No más guerras, no más muertes son tiempos para amar, perdonar vivir en armonía y en paz. Cómo los hombres de bien que se can tranquilos a trabajar y cuando mueren lo hacen rodeados del amor de los que los rodean y al irse gozarán de la vida eterna. Es tiempo de reflexionar no pierdas lo más por lo menos porque créeme esta vida no es eterna y en el momento menos esperado acabará, y cuando eso pase deseo que te vayas tranquilo y puedas descansar en paz.